Son frecuentes en pueblo de la península en general, y de la Sierra de San Vicente en particular. Algunos historiadores apuntan a su origen precristiano, otros vinculan esta fiesta con las epidemias de peste que asolaron Europa durante el medievo llegando incluso hasta entrado el siglo XVII.

» Y para evitar la pestilencia de la muerte se encendían hogueras para purificar el aire, provocando grandes humaredas y hogueras de romero, cantueso, tomillo y enebro. Estas hogueras, las luminarias, ardían también durante toda la noche, y los mozos del pueblo las recorrían ataviados con colgajos de cencerros.»

Con el tiempo, algunas localidades las fueron vinculando a los santos de sus parroquias: Santa Catalina, San Blas, San Andrés … son algunos ejemplos de los santos a los que iglesia vinculó esta tradición en las localidades de la comarca. Ese día se encendían hogueras a las puertas de las casas, los vecinos aportaban algo de leña y también se quemaban trastos viejos, cestas rotas, escriños, escobones … y los mozos con cencerros recorrían las calles y saltaban las hogueras.

En Pelahustán, se vincularon a San Andrés, nuestro patrón, y desde hace algunos años gracias a la Asociación de Mujeres El Fustán se han ido recuperando. Creemos importante cuidar y mantener esta y otras tradiciones que hemos ido perdiendo, tradiciones ancestrales y endémicas que en definitiva dan carácter a nuestros pueblos.

Para potenciarlas, darles más visibilidad y fomentar la participación hemos propuesto este año celebrarlas en fin de semana para que asociaciones, peñas y ayuntamiento puedan colaborar y disfrutar de la recuperación de esta fiesta tradicional.

¡Que la Fiesta de las Luminarias ilumine nuestro camino y traiga salud y prosperidad a Pelahustán! ¡Os esperamos con los brazos abiertos y los corazones encendidos!

Luminarias 2023
Fotografías: Ramón Verdugo

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